En los tiempos de crisis se ve el verdadero carácter

Porlaredaccion

10 de noviembre de 2021

Gurú de las Diagonales

En los tiempos de crisis, se ve el verdadero carácter de la gente.

Cuando las victorias se acumulan, todos nos agarramos de la mano y cantamos al unísono, pero cuando la adversidad te golpea, son pocos los individuos que pueden mantenerse firmes a sus principios.

Históricamente, el talento todo lo supercede en la NFL. Los ejemplos sobran y hay un sinfín en los que la liga decide mirar hacia otro lado y dejar la moral a un costado con tal de contar con un jugador que puede ayudarlos a conseguir el logro máximo.

Los tiempos, sin embargo, están cambiando y si bien los extremos nunca son buenos, entiendo que hay quienes piensan que la «cultura de la cancelación» no es buena y que una excesiva sensibilidad instalada en la sociedad. No estoy interesado en etiquetas generales y habría que analizar cada caso en particular por separado.

Ahora bien, no quedan dudas de que la sociedad hoy tolera menos pecados del pasado que se habían hecho rutina y eso es bueno. El cambio siempre produce shock, pero información es poder y la mayoría de las modificaciones prueban ser positivas con el paso del tiempo, lo cual nos lleva al empoderamiento de los jugadores.

En un mundo de millonarios contra multi millonarios, generalmente son los segundos que terminan imponiendo su voluntad.

Más allá de quién pague los salarios, los jugadores son la razón por la que los fanáticos sintonizan los partidos y me encanta que de a poco ganen un lugar más protagónico. Ahora bien, hay una diferencia entre empoderamiento y mostrar un carácter cuestionable.

El receptor Odell Beckham Jr. fue cortado por los Cleveland Browns luego de que su padre publicara un video en el que critica a su mariscal Baker Mayfield.

Nos podemos sentar a debatir acerca de si Mayfield es la respuesta o no a futuro para Cleveland o si Beckham encajaba en esta ofensiva o no, pero, a mi juicio, que tu padre publique un video semejante cruza la línea de la traición a un compañero.

Mayfield también busca su próximo contrato y, esencialmente, con esa acción decides criticarlo públicamente en lugar de reunirte con él en privado para forzar tu salida sin importarte cómo esto afecte al resto de tus compañeros y antes de que alguno me diga que fue su padre y no el jugador, pueden estar seguros que esto fue un esfuerzo coordinado con tweet de LeBron James incluido y que Beckham Jr. sabía lo que iba a publicar su padre de antemano y al día de hoy, el receptor todavía no ha llamado a Mayfield para pedirle disculpas.

Lo más increíble es que no es la primera vez que le pasa, porque Odell tampoco se fue bien de los Giants.

Nadie puede negar que Beckham Jr. tiene talento y aquella increíble atrapada a una mano todavía vive en nuestras retinas, pero tampoco se puede negar que su carácter es cuestionable. Si se fue mal de los Giants y se fue mal de los Browns, tal vez el problema es él.

En 2018 y 2019, superó las 1,000 yardas por recepciones, pero el año pasado lidió con lesiones y la producción de esta temporada ha sido muy por debajo de lo esperado. La próxima campaña va a cumplir 30 años y si bien alguien lo reclamaba de waivers, ese equipo iba a tener que pagarle $7.5 millones por, esencialmente, un alquiler y la lista de equipos interesados no fue tan larga como muchos se imaginaban.

Si yo fuese un equipo candidato, no lo contrato ni de milagro, porque son más los dolores de cabeza que la producción en estos momentos. Aunque si es a corto plazo y a bajo precio, entendería el interés de por ejemplo Patriots y Saints, que requieren de mayor explosividad en el cuerpo de receptores.

Al mismo tiempo, es curioso que con esta tormenta en puerta, la gerencia de los Browns no haya concretado un cambio días antes para, al menos, conseguir algo a cambio; merecen las críticas por cómo manejaron esta situación.

La fecha límite de intercambios se fue sin mucho ruido después de tantos amagues en la previa. El mariscal Deshaun Watson, quien todavía tiene 22 causas civiles abiertas, se queda en los Houston Texans, lo cual tiene toda la lógica del mundo.

Hubo muchos rumores que vinculaban a los Dolphins con Watson, pero la realidad es que Miami no iba a hacer el movimiento hasta tener más claridad con respecto a la situación legal del pasador. De hecho, los Texans y la NFL le dieron permiso al dueño de los Dolphins, Stephen Ross, para hablar con Watson.

Esencialmente, Ross le dijo a Watson que si llegaba a un acuerdo con todas las demandantes, el cambio se haría. Houston se enteró de la intención de los Dolphins y subieron el precio, momento en el que Miami se bajó de la ecuación. Además, luego nos enteraríamos que varias de las demandantes de Watson no están interesados en un acuerdo económico.

Es muy posible que las conversaciones se vuelvan a retomar en la temporada baja, aunque ni los Dolphins ni otro equipo lo firmarán a no ser que tengan claridad con respecto a su situación legal.

En lo deportivo, Watson es uno los jugadores más talentosos de la liga, que además juega en la posición más influyente, por lo que veremos cómo esa línea de la moral se volverá a poner borrosa.

Watson jugará en otro equipo la próxima temporada y como tiene una cláusula de no cambio, los Dolphins son aún la opción más viable, pero en una era donde por alguna razón que me cuesta comprender, muchos periodistas quieren ser los primeros en lugar de dar información veraz, vimos una ola de rumores y afirmaciones incorrectas.

El nombre que más furor causó en la fecha de límite de intercambios fue el de Von MIller, quien fue cambiado de los Denver Broncos a Los Angeles Rams por una selección de segunda y otra de tercera ronda en el próximo draft.

Desde que ingresó a la NFL, nadie tiene más capturas que Miller y lo mismo puede decirse de Aaron Donald. No quedan dudas de que si bien Miller no es ya uno de los mejores cinco cazamariscales de la liga, aún tiene mucho que aportar y la defensiva de los Rams da un salto de calidad importante.

Los equipos que pueden anotar rápidamente y consiguen presionar al mariscal rival suelen tener una fórmula exitosa en sus manos.

Hay quienes critican a los Rams, porque piensan que pagaron demasiado por esencialmente un alquiler, pero aplaudo la franquicia angelina.

Las ventanas de éxito en la NFL son muy pequeñas y me gusta cuando las franquicias son agresivas en busca de la gloria. Es lo que todo fanático quisiera de su equipo haga, por más de que después termine por no funcionar.

No se ganará ninguna pelea en la cual ni siquiera se intenta golpear y los Rams piensan que este es su año.

A mi juicio, son el equipo más completo de la NFL y tal vez la única duda sea cómo Matthew Stafford va a reaccionar en partidos de Playoffs, dado que el mariscal nunca ha ganado un duelo de Postemporada.

Más que en cualquier posición, el carácter y la capacidad de liderazgo son vitales para todo mariscal. Se necesitan líderes de hombres, porque el talento no siempre alcanza, aunque sea la faceta más importante.

Fuente: ESPN.