Los grupos del crimen organizado quieren enviar el mensaje de que aún son fuertes
Por los hechos de violencia en Jalisco, Guanajuato, Chihuahua y Baja California, 36 personas han sido detenidas, informaron este lunes autoridades del gabinete de seguridad del gobierno federal.
Luego de esta ola de violencia en el país, manifestada en ataques contra civiles, quema de establecimientos, autos incendiados y bloqueos, este lunes el gabinete de seguridad federal ofreció una conferencia de prensa para dar detalles sobre la violencia que inició en Guanajuato y Jalisco, al intentar la captura de Ricardo Ruiz Velazco y de Gerardo González Ramírez, presuntos líderes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), y que continuó en Chihuahua tras la riña en un centro de readaptación social.
El subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía, informó que fueron tres docenas de detenidos por los actos de violencia.
“Esto suma un total, por estos eventos, al momento que estamos informando, de 36 detenidos puestos a disposición del Ministerio Público del fuero común y del fuero federal”, precisó.
Este fin de semana además se detuvieron por otros hechos violentos a más de 3,000 personas en el país.
“Este fin de semana por ilícitos del fuero común y federal hubo 3,630 detenidos; hablamos de una cifra que se da en todo el territorio del país durante tres días y este Registro es parte de las reformas que este gobierno ha impulsado y que, además de ser público, pues ilustra la capacidad de reacción del Estado Mexicano”, dijo.
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, aseguró que los actos de violencia de la última semana responden a algún tipo de distracción o para enviar un mensaje a otras bandas del crimen organizado.
“De alguna forma las organizaciones van buscando cómo hacer para poder distraer a las fuerzas de seguridad, para que atiendan una situación y ellos poder hacer otra o también por el debilitamiento quieren hacerse, sentirse fuertes y generan situaciones de violencia donde a manera de publicidad puedan estar mandando sus mensajes de que aún son fuertes cuando en realidad poco a poco se ha ido minando esta estructura delincuencial”, explicó.
Ricardo Mejía coincidió con este señalamiento y consideró que, al verse mermados, los miembros del crimen organizado buscan demostrar poderío.
«Como reacción a estas acciones y para buscar generar un impacto social, los grupos delictivos han realizado estas acciones con un propósito de propaganda criminal, para buscar generar psicosis social ante su disminuida capacidad delictiva», agregó.